En esta época del verano, los ordenadores tiendan más a estropearse. Una de esas razones es que en el verano hace más calor. Temperaturas sobre los 35 grados no son buenas para ninguna máquina.
Los ordenadores de por sí no resisten demasiado el calor, necesitan tener unos ventiladores para que ventilen la placa madre y el microprocesador. Si no estuvieran, nuestro PC se apagaría solo porque no puede seguir funcionando. Si a esto le unimos la temperatura ambiente, ya tenemos un factor de riesgo elemental por el que se puede estropear tu ordenador.
Consejos para cuidar tu estación de trabajo en verano
Se deben tomar medidas para que el ordenador, portatil, servidor no se estropeen y puedan ventilarse sin llega a sobrecalentamientos peligrosos:
1. No poner el PC en el suelo. Es una mala costumbre poner la torre en el suelo junto a la pared, o introducirla dentro de un estante o cajón del escritorio, impidiendo que el aire caliente pueda salir por las rejillas con comodidad. Tiene que haber algo de espacio alrededor, ya que así será más fácil que el aire se renueve.
2. No lo dejarlo al sol, o junto a una ventana. Si tenemos el PC, portátil o móvil junto a una ventana, durante más de una hora, es probable que le esté pegando el sol de lleno. El sol calienta, incluso si lo tienes apagado. No es una buena idea colocarlo en ese sitio.
3. Controla las opciones de energía. Los PC y móviles tienen un sistema para ahorrar energía y no sobrecalentarse cuando no se está usando. Por eso sale el protector de pantalla, o la pantalla se apaga sola al rato de estar encendido. Vigila que tu ordenador no tarde demasiado tiempo en ponerse en reposo, ya que estas cosas son útiles, sobre todo si te vas unas cuantas horas y te lo dejas encendido, algo que solemos hacer por evitar el tiempo de encendido, pero que no es nada recomendable.
4. Ventila la oficina. Si la temperatura ambiente está rondando los 30 grados y no hay aire acondicionado, mal asunto. Prueba a abrir las ventanas, instalar unos ventiladores (y si es cerca del PC, mejor), bajar las persianas para que no entre el sol, o tener las luces apagadas. Lo que veas que mejor funcione. Utiliza un termómetro para comprobarlo.
5. Limpia el ordenador. Áspirarlo, especialmente las pelusas y roña que se acumulan en las aspas de los ventiladores internos. Procurad que las rejillas y agujeros estén limpios para que pueda pasar el aire.
6. Ápagalo. Si durante el fin de semana no va a ser utilizado, apagadlo. Normalmente en las oficinas, los aires acondicionados se detenienen durante el fin de semana, pero los servidores continuan activos. Si es necesario, por necesidades de trabajo, que siga encendido, dejad bien ventilada la sala del servidor y si fuera necesario, un ventilador o aire acondicionado activo en su área.